La Enmienda Hyde (The Hyde Amendment) respeta la conciencia del pueblo estadounidense al prohibir el uso de los fondos de los impuestos para pagar la mayoría de los abortos electivos. Incluye excepciones para casos de violación, incesto, o riesgo de mortalidad materna. Dado que no protege completamente a todos los no nacidos, no es una política perfecta. Sin embargo, como compromiso bipartidista, al menos está reduciendo el número total de abortos y protegiéndonos de ser forzados contra nuestra voluntad a pagar por la matanza de inocentes. La Enmienda Hyde está siendo atacada actualmente por la Casa Blanca y algunos miembros del Congreso.

Siendo que no es una ley permanente, la Enmienda Hyde debe de ser conectada cada año a individuales proyectos de ley de asignaciones federales para que entre en vigencia. Desde 1976, tres años después de la decisión de la Corte Suprema Roe v. Wade, esta enmienda se ha convertido en ley cada año, independientemente de si el Congreso o la Casa Blanca fueron dirigidos por republicanos o demócratas. Se basa en el consenso de que los contribuyentes de impuestos no deben verse obligados a financiar este procedimiento que tantos estadounidenses encuentran éticamente objetable.

El aborto es la destrucción intencional de un bebé humano inocente e indefenso. Es un atentado injusto y violento contra la vida. Es un mal intrínseco, que significa que nunca se permite ni se justifica moralmente, sin importar las circunstancias o intenciones individuales. El aborto no es un cuidado de la salud y no es un derecho humano básico. El feto es un paciente, no una enfermedad o un agresor injusto. El derecho fundamental del niño a la vida proviene de Dios, no de la decisión de alguna persona de que quiere aceptar al niño.

La Enmienda Hyde es una disposición bipartidista que ha sido parte de la legislación federal sobre asignaciones durante 45 años. También ha servido como modelo para muchas otras políticas federales que prohíben al gobierno financiar abortos en otras áreas, como en programas de asistencia extranjera y programas de salud comunitaria. Se estima que más de 2.4 millones de niños nacieron debido a las protecciones de la Enmienda Hyde.(1)

La Enmienda Hyde deja a las legislaturas de los cincuenta estados libres para proporcionar fondos estatales para el aborto si así lo desean. La mayoría de los estados han optado por seguir los criterios de la Enmienda Hyde.(2) Leyes como la Enmienda Hyde dejan a todos, incluidos aquellos que quieren pagar los abortos de otras personas, libres para actuar según sus propias convicciones.

Todas las mujeres merecen los recursos que necesitan para cuidar plenamente a sus bebés y darles la bienvenida en un ambiente estable y amoroso. El dinero del gobierno se gastaría mucho mejor en apoyar a las mujeres en embarazos inesperados o desafiantes y a las madres primerizas con dificultades que en acabar con la vida de sus hijos. La Enmienda Hyde ha sido ampliamente apoyada por la mayoría de las mujeres de bajos ingresos en este país, incluidas las mujeres de color.(3)

Algunos que apoyan el aborto afirman que la Enmienda Hyde es racista. De hecho, es todo lo contrario. La industria del aborto en este país se dirige desproporcionadamente a las personas de color y reduce sustancialmente los nacimientos de mujeres de color en un grado mucho mayor que los nacimientos de otras mujeres. Las mujeres afroamericanas e hispanas tienen muchos más abortos como porcentaje del total en este país que sus porcentajes representativos en la población estadounidense. Las clínicas de aborto en los Estados Unidos están ubicadas de manera desproporcionada en vecindarios de minorías o cerca de ellos.(4) Dado que la Enmienda Hyde tiene el efecto de reducir el número de abortos en general, está protegiendo a los niños no nacidos de color que están desproporcionadamente amenazados por el aborto.

Por muchos años como senador de los Estados Unidos, Joe Biden apoyó la Enmienda Hyde. Sin embargo, en junio de 2019, como candidato de presidente que enfrentaba una presión considerable de los partidarios del aborto, revirtió su posición anterior y pidió la eliminación de la Enmienda Hyde. El presupuesto del año fiscal 2022 que presentó recientemente al Congreso no incluye la Enmienda Hyde. Aunque hay varios aspectos de su propuesta de presupuesto que apuntan a ayudar a las personas vulnerables, su propuesta les quita la protección previa a los seres humanos más vulnerables de todos -- aquellos que están creciendo en el útero.

Debido a que la política de salvar vidas de la Enmienda Hyde se encuentra ahora bajo una grave amenaza de reversión, este es un momento crítico para que los estadounidenses de pro-vida permitan que nuestras voces sean escuchadas. La Enmienda Hyde y políticas similares se enfrentan ahora a la amenaza más grave a su existencia desde que se promulgaron.

Animo a todos a que firmen una petición para salvar la Enmienda Hyde. Esta petición se puede encontrar en www.notaxpayerabortion.com. Se enviará a los miembros del Congreso y su personal. Se insta al Congreso a asegurar que la Enmienda Hyde y todos los créditos pilotos de salvamento similares permanezcan en vigor durante el 117º Congreso y más allá. La petición dice: “No obligar a los estadounidenses a subsidiar la muerte de inocentes. Oponerse a cualquier proyecto de ley, incluido cualquier proyecto de ley de asignaciones, que amplíe la financiación del aborto por parte de los contribuyentes de impuestos.”

El mes de julio de 2021 es un momento crítico para la consideración de este asunto por parte del Congreso de los Estados Unidos. Comparta el mensaje. No se debería obligar a los estadounidenses a subvencionar la eliminación de vidas humanas inocentes.


1. Michael J. New, “Addendum to Hyde@40,” Charlotte Lozier Institute, 21 de julio de 2020.
2. Guttmacher Institute, “State Funding of Abortions Under Medicaid,” 1 de septiembre de 2020.
3. “¿Apoya o se opone a la Enmienda Hyde?,” Encuesta de YouGov 2016.
4. Willis L. Krumholz, “Sí, Planned Parenthood se dirige y daña a las mujeres de color pobres,” The Federalist, 18 de febrero de 2016.