por Obispo Michael J. Sis
Señor, te doy gracias por mis dones y talentos.
Todo lo que soy y todo lo que tengo es un regalo tuyo.
Abre mis ojos para ver las necesidades del mundo alrededor.
Me has dado sólo una vida para vivir.
Muéstrame lo que quieres que haga con esta vida.
Ayúdame a superar mis temores y mis sentimientos de insuficiencia.
Ayúdame a confiar en que tú nunca me pedirás nada
que no me darás también la gracia y la fuerza para llevar a cabo.
Aquí estoy, Señor, envíame.